A un año de los atentados del 15 de septiembre en Morelia Michoacán, en donde perdieron la vida ocho personas y más de un centenar quedaron heridos tras la explosión de dos granadas. Sin embargo es un acontecimiento que debe ser recordado sin excusa alguna, ya que precisamente sucedió en la fecha de mayor importancia para nuestra nación, que es el día de la independencia nacional.
Esta es una muestra más para que cada uno de los mexicanos reflexionemos acerca de la supuesta libertad de la nación y decidamos cómo actuar para evitar todo este tipo de injusticias, y si no, seguir gritando irracionalmente el Viva México, mientras que otros, sufren los estragos de la "libertad".
2 comentarios:
Me uno contigo, este verano pasé 5 semanas en Páztcuaro y me pilló toda la movida que hubo con los narcos, fue muy desagradable ver como México pierde su encanto por una minoría muy poderosa, y me preguntaba que había detrás de todo esto?... no quiero ni pensarlo, pero esta vez México estaba distinto, no era el mismo.
Un abrazo Chucho.
Hola Chucho
Me has gustado mucho tu exposición y como los has relatado, además las fotos son muy intensas.
El pasado mes de Julio estaba trabajando en México, sobre un proyecto de fotografía en el que participo desde hace 4 años, y estando en Michoacán me pilló todo lo que pasó con La familia, estuve 10 días atrapada cerca de Morelia.
Gracias que estaba en casa de unos amigos fotógrafos, pasé esos días más protegida y no sentí miedo, pero si pude entender y sentir cosas que en otras ocasiones, sólo había sentido desde lejos.
Una semana después de aquello, regresé al D.F, y me reuní con mi esposo que llegaba desde España. Él es un mexicano muy sensible y reflexivo, pero a la vez un hombre inteligente y con criterio.
Lo llevé hasta el reloj de l catedral , ese que va contando los días del Bicentanario, y le pregunté: - Mario, dime que celebran?.
Ël no entendía mi pregunta porque era obvio, pero cuando le expuse lo que yo sentía, ( que es lo que expones tú en tu relato) le dije que todo estaba igual para mi parecer, que nada había cambiado y que México era todo menos "independiente".
Entonces le dije a mi esposo que me parecía un poco absurdo, lo del grito y todo lo demás, se que ya es algo cultural, yo misma hice este año un post sobre ello en mi blog. Pero el sentido que le dan las autoridades, hace esconder al mexicano de verdad.
Quizá ahora no haya españoles imponiendo, o doctrinando, pero hay otros tipos de evangelizadores... que son más peligrosos.
Iré a celebrar el Bicentario, y confío que México cambié y regrese a su status, pero es muy difícil, Chucho.
Y créeme, me produce una profunda tristeza. Quizá como decía aquel, haría falta otra revolución.
Un abrazo y cuídate.
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